Muy querida comunidad educativa:
Es grato encontrarnos nuevamente después de haber disfrutado de las vacaciones de verano y ver los pasillos, aulas y patios de nuestro querido colegio llenos de vida y entusiasmo. Una vez más nos apasiona la misión de educar y evangelizar. Seguramente todos tenemos muchas expectativas para este ciclo escolar. Aunque parezca que todos los años realizamos la misma rutina, es lindo disfrutar de esta hermosa tarea acompañando el crecimiento integral de tantos niños y jóvenes integrantes de toda una sociedad que va haciendo camino.
Invito a cada uno de los miembros de nuestra Comunidad Educativa a vivir intensa y santamente este período, cultivando las actitudes de amor y respeto que nos pide el Señor Jesús, haciendo siempre el bien, sin caer en la tentación de responder al mal con el mal, sino vivir el gran proyecto de amor que nos propone en su Evangelio.
Con la Iglesia avanzamos en el tiempo de Cuaresma. Hemos iniciado en nuestro colegio, el primer día de las actividades escolares, con la bendición de las cenizas. Pronto estaremos iniciando las celebraciones penitenciales, la semana santa y por supuesto celebrando la Pascua de Resurrección del Señor.
Como comunidad educativa, para este año, tenemos el lema “PALABRA, PAN DE VIDA”, el mismo del año pasado porque aun estamos en el Año Bíblico, que finaliza el 4 de junio con la fiesta de Pentecostés. Los animo a que sigamos profundizando nuestro acercamiento a la Palabra y que ella sea la guía para nuestro caminar en este año 2006.
Desde la Palabra de Dios y teniendo en cuenta nuestros objetivos, una vez más el equipo de conducción ha priorizado para este año 2006, la calidad educativa en todo sentido.
Por eso les propongo a que apostemos, como educadores, lo mejor de nosotros sin escatimar esfuerzos, como padres y/o tutores acompañando con seriedad y responsabilidad el proceso de aprendizaje de los niños y jóvenes, sin justificar las conductas inadecuadas o el bajo rendimiento de los mismos, lo que nos parece lamentable y más aun cuando se responsabiliza de esto, a la institución y como alumnos priorizando el estudio y adhiriendo a las propuestas del colegio desde el primer día del ciclo lectivo.
Quiera Dios, que el Espíritu que nos ha acompañado durante todo este año Bíblico, nos siga bendiciendo y fortaleciendo para concretar, compartir y celebrar con alegría las actividades de este año.
Sigamos fraternalmente unidos en la Misión de educar y evangelizar.
P. Juan Rajimon SVD
Representante Legal
Marzo 2006

